Correo

greenglauco@gmail.com

domingo, 9 de marzo de 2025

Segunda carta

Hola! Buenos días! Cómo te va? 

Te escribo, aunque no espero respuesta, para decirte, aunque suene triste, que no han sido pocas las veces que he pensado en tí en todo este tiempo. Que aunque borré tú contacto no me ha costado encontrar la conversación, y aunque te dejé de seguir en Instagram, cada pocos días visitaba tu perfil. Aunque suena patético, pero me da igual. 

Es posible que ver a Angélica Liddell, y lo desgarrador de su tragedia teatral, me haya dado el empujón ha escribirte, aunque no obtenga respuesta, pero por lo menos para que dentro de mi no quede la espina de no haberte dicho lo que siento o sentía.

No sé exactamente si era lo que me gustaría haberte dicho mirándote a los ojos, seguramente lo que ahora escribo es una versión más reposada, más meditada, menos impulsiva y visceral.

Y es que con el poquito tiempo que pasé contigo algo hizo click dentro de mí, genuinamente me gustabas, y me parecías la cosa más bonita del universo. Tú mirada, tu voz, tu cuerpo... Resonaban cómo una perfecta armonía, y dejaban un eco. Un eco dulcificado en el tiempo.

Aunque me dijises lo que me dijeras, siento que simplemente te doy asco, o vergüenza, o qué se yo, puede que simplemente fuese un pesado o un tío patético. Pero no me quiero ir de este mundo sin intentar dejarte claros mis sentimientos, qué aún siento no haber expresado claramente. 

Veo que eres la persona más ocupada del mundo, y no quiero ser un estorbo. No quería hacerte perder el tiempo, sólo abrazarte, y no quería tu atención constantemente, sólo apoyarte en lo que sea, o sentirme apoyado, o sentirme amado y que te sintieras amada. 

En fin, el simple hecho de tener que haber escrito esto ya me produce bastante tristeza. Supongo que algunos nacemos para la melancolía y la soledad. Pero al menos quiero agradecerte que contigo durante unos instantes no me sentí sólo, así que supongo que gracias. Ojalá volver a verte algún día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario